La Crianza de nuestras Manzanillas se realiza en nuestras bodegas enclavadas en el casco antiguo de Sanlúcar.

Nuestras soleras de crianza biológica y oxidativa se encuentran en nuestro núcleo bodeguero de la Calle Mar junto al Convento de Santo Domingo, en pleno Barrio Bajo sanluqueño. Cascos bodegueros por debajo del nivel freático con un microclima especial que dotan a la Manzanilla de la sapidez y salinidad propias y características de los vinos de Argüeso, los más apreciados y consumidos por la gente de Sanlúcar.

Entre nuestras bodegas del Barrio Bajo destacan las de Santo Domingo, la Sacistía y San León, donde se cría y reposan los toneles de la preciada Manzanilla Pasada San León Reserva de Familia.